En prisión quedaron los asaltantes de la Copec y protagonistas de una feroz persecución policial

• Agredieron a personal de Carabineros, chocaron dos radiopatrullas y tres vehículos particulares, en su loca huida.

No solamente fueron enviados a la cárcel por el asalto a la estación de servicio Copec de 21 de Mayo, sino que también por agredir a personal de Carabineros, chocar dos radiopatrullas y tres vehículos particulares.

Ayer se conocieron más antecedentes del hecho policial que protagonizaron Víctor Eduardo Toledo Villarroel y Raúl Ignacio Sánchez Yáñez, en el contexto inicial de una carga de combustible que terminó en un asalto a mano armada.

Es de lo que dio cuenta la asistente de fiscal Katerina Aranis al formalizar a ambos sujetos por robo con intimidación, entre otros delitos, y confirmar aspectos que entregó Carabineros el domingo en la mañana.

Por versión de testigos y uno de los despachadores del servicentro de calle 21 de Mayo Nº1404, los antisociales llegaron esa mañana a bordo de un vehículo BMW, color negro y vidrios polarizados.

Toledo conducía. Fue él quien pidió una carga de 30 mil pesos en bencina. 

¿Cómo cancela? Preguntó el “bombero”. Con débito, respondió Toledo, como si fuera a pagar. 

En esos momentos el sujeto sacó un cuchillo y le dijo: “¡entrega toda la plata o si no te mato!”.

Asustado e intimidado el trabajador le entregó 20 mil pesos. Pero Toledo lo encontró poco así que revisó sus bolsillos y le sacó otros 50 mil pesos, escapando con 70 mil pesos.

Persecución

La víctima llamó de inmediato a Carabineros y les entregó las características físicas del asaltante y del vehículo.

Una hora y media después los funcionarios policiales localizaron el BMW de color negro circulando por José Martínez de Aldunate con Juan Martínez de Rozas.

A partir de ese momento comenzó una persecución con sirenas y luces, desconociendo la policía que el conductor manejaba bajo los efectos del alcohol y la cocaína.

Por alto parlante los funcionarios le ordenaron que se detuviera, pero no hubo respuesta, iniciándose la búsqueda por diferentes calles.

En Chacabuco con Rancagua, el chofer del vehículo realizó una maniobra de retroceso y con ello impactó la parte frontal de uno de los vehículos nuevos de Carabineros, un Hyundai Santa Fe.

Luego, en minutos, la misma persona chocó el lado del copiloto de otra patrulla, de la misma marca.

De ahí siguió huyendo y al llegar a calle Isla de Pascua, altura del Nº1122, población El Pingüino, colisionó la parte frontal de un auto Suzuki Swift, estacionado sobre la acera. 

Viendo que no podía seguir escapando, un oficial de Carabineros bajó para detenerlo, pero el chofer aceleró el vehículo que conducía con la intención de impactar la puerta donde se encontraba el funcionario, quien en esos momento sno le quedó otra alternativa que disparar su arma de servicio para repeler el ataque.

Toledo no paró ahí. Por el contrario, retomó la marcha y con su vehículo impactó un Mitsubishi Pajero, estacionado fuera de una casa. Huyó por calle Isla de Pascua y al llegar a Augusto Lutz chocó frontalmente otro vehículo y siguió escapando, hasta llegar a la Avenida Salvador Allende, frente al Nº0699, donde chocó contra una señal de tránsito y terminó su loca carrera sobre la vereda.

Mientras que su amigo Raúl Sánchez, encontrándose detenido al interior de un vehículo policial provocó diversos daños en la puerta trasera izquierda.

Ambos fueron formalizados por robo con intimidación, pero Víctor Toledo además por manejo bajo la influencia del alcohol y sustancias sicotrópicas. Amenazas, atentado contra la autoridad y daños contra la propiedad.

Y Sánchez deberá responder también por atentado contra la autoridad y daños calificados. Este último, alias el “Cuervo”, presenta un amplio prontuario policial.