Dos detenidos en aeropuerto por portar munición de guerra
Este domingo pasaron dos hombres a control de detención por el mismo delito: porte ilegal de munición. En uno de los casos, la detección fue previa a subir al avión, mientras que el otro, en el escáner de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC). Fueron dos vuelos distintos, con casi 5 horas de diferencia, en las que las circunstancias de la detención mantenían similitudes.
El primer caso se registró a las 12,40 horas en el sector de facturado de equipaje de bodega, cuando al revisar con equipo de rayos X, que el imputado Ignacio Tapia Vera portaba una munición de guerra de alto calibre dentro de su maleta. Se declaró ilícito al no haber sido reportada y no contar con licencia alguna de armas en la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), contraviniendo la Ley de Control de Armas.
El fiscal Felipe Aguirre indicó que se trata de un delito grave, que es de pena efectiva y puede llegar hasta pena de crimen. Se solicitaron las medidas de firma mensual y arraigo regional. Sin embargo, al estar el imputado domiciliado en Puerto Montt, se modificó el arraigo a nacional, manteniendo la firma en la Primera Comisaría de Puerto Montt. El plazo de investigación se determinó en 90 días.
El segundo caso fue cercano a las 18 horas en la sección de equipajes, cuando en su bolso de mano fue detectada “una munición de guerra de alto calibre, de 7,57 mm, equipaje que se encontraba facturado a nombre del imputado”, narró el fiscal Aguirre. Igual que en el otro caso detectado, no contaba con armas registradas a su nombre en la DGMN, por lo que fue detenido por el delito de porte ilegal de municiones en situación de flagrancia.
Para este último caso se requirió de las medidas cautelares de firma mensual y arraigo regional, lo que fue acogido por el juez Juan Villa Martine. Igualmente se dictaminó un plazo de investigación de 90 días.
El presidente de la Asociación Nacional de Especialistas en Seguridad Aeroportuaria (Anesa) de Punta Arenas, Angel Muñoz, agregó que “estos son procedimientos de rigor, considerando que es una zona donde se efectúa servicio militar y hay gran contingente militar. Entonces, ocurre que en ocasiones es por olvido y en otras es porque gente quiere llevar de recuerdo municiones o partes de una munición, como una vainilla percutada y ese tipo de cosas. En este caso son municiones de guerra, las cuales las detectamos al pasar por los equipos de rayos X”.