Los motivos detrás del cambio de gabinete de las delegaciones provinciales

• El delegado presidencial regional José Ruiz, aseguró que la medida tiene como objetivo que el gobierno tome un nuevo rumbo.

La primera señal del cambio de gabinete fue la renuncia del concejal socialista por Natales, Guillermo Ruiz. Esta se concretó el lunes a las 15 horas en una sesión extraordinaria del Concejo Municipal de la capital de Ultima Esperanza. En Natales Romina Alvarez se enteró antes que sus otras compañeras delegadas quienes entre las 18 y 19 horas recibieron un llamado del delegado presidencial, José Ruiz Pivcevic, comunicando que su trabajo como delegadas había finalizado.

La salida de Romina Alvarez, Karim Fierro y María Luisa Muñoz fue ideada por el propio Ruiz Pivcevic quien con esta decisión busca dar una mejor conducción a estas reparticiones en un año electoral. “No es un cambio azaroso, cada persona designada cumple un objetivo, tiene un rol y una experiencia que va a contribuir en aquello”, expresó en un punto de prensa ayer el delegado Ruiz.

“La señal es rara porque se jode la paridad”, analiza el socialista Juan Marcos Henríquez. Este remezón a nivel delegacional deja en término de números a la mujer en una posición de desventaja debido a que de los tres cargos que estaban liderados por mujeres hoy sólo es uno.

Ruiz justificó que “este cambio obedece a un sentido, a una orientación”. Descartó realizar en público evaluaciones a la gestión de las tres autoridades salientes, sin embargo, transparentó que en la llamada telefónica a cada una les dijo lo bueno y malo de su paso por el gobierno.

Los motivos de las renuncias

A pesar que la delegación no quiso revelar los reales motivos detrás de las salidas de las tres autoridades provinciales, el cambio se venía gestando desde hace meses. El cambio originalmente se iba a realizar en marzo e iba venir acompañado de seremías. Esta modificación es con miras a las próximas elecciones municipales y para preparar el terreno para la presidencial.

En conversación con El Magallanes, cuando cumplió un año en el poder descartó cambios en su equipo y aseguró que “las personas que están ejerciendo cargos en el gobierno tienen nuestra confianza”. A nivel de delegaciones esa confianza se perdió ayer con la remoción.

Romina Alvarez era uno de los nombres que venía desde marzo sonando para dejar el gobierno. Sus críticos la acusaban de no plasmar las ideas del gobierno en la provincia, deficiente manejo de los pasos fronterizos entre otras cosas. Alvarez se defiende y hace un mea culpa en que le faltó mejor comunicación para informar de todo lo que estaba haciendo. En conversación con La Prensa Austral, enumeró una serie de iniciativas que logró como máxima autoridad provincial. “Digitalizamos lo pasos fronterizos, acercamos los servicios públicos a las localidades alejadas, levantamos una residencia para personas discapacitadas”, indicó.

Alvarez fue avisada de su salida a las 18,30 horas, de inmediato se puso a arreglar la oficina para la nueva autoridad, el ex concejal Guillermo Ruiz. Militante socialista, ex funcionario de Michelle Bachelet y uno de los concejales más cercano a la alcaldesa natalina, Antonieta Oyarzo.

“Me toma por sorpresa, pero se entiende”, dijo la ex delegada provincial de Tierra del Fuego, Karim Fierro, quien defiende su gestión. En conversación con La Prensa Austral, destacó los avances en inversión con el convenio de programación del Mop, los temas sociales y la conectividad vial.

Fierro definió esto como un cambio de énfasis en la gestión, aunque mostró sorpresa por la salida de las tres autoridades y que se redujera la participación femenina en el gobierno. “Quiero pensar que nuestra salida se dio un equilibrio en otros territorios”, expresó.

Al interior del oficialismo se habla que su salida no se debe a un criterio de evaluación, sino que al apoyo que está dando al candidato de izquierda Cristián Andrade, quien está buscando firmas para competir contra el radical José Gabriel Parada. “Cristián Andrade es querido por la comunidad, él va como candidato”

Por su parte desde la provincia Anártica, María Luisa Muñoz no se esperaba esta salida. Fuentes consultadas aseguran que su salida se gestó por la poca presencia que la autoridad provincial tenía en Santiago y la poca relación con los distintos ministerios quienes terminaron por pedir su cabeza. En entrevista con La Prensa Austral en mayo, reconoció que nunca había viajado a Santiago a acelerar proyectos o hacer gestiones. “Nosotros normalmente llegamos hasta Punta Arenas”, señaló. Incluso transparentó que el Presidente nunca la había llamado.