Necrológicas

El “Kraken” zarpó al mar de la eternidad: a los 87 años muere Francisco Ayarza Ordenes

Jueves 12 de Noviembre del 2020

Compartir esta noticia
2,230
Visitas

Kraken”, el gigantesco calamar de la mitología escandinava que devoraba barcos, fue el nombre que distinguió a Francisco Ayarza Ordenes en la Hermandad de la Costa, la cofradía de hombres de mar, que ayer lamentó su partida, a la edad de 87 años. Pero lo que más distinguió a este porteño nacido el 30 de enero de 1933 en Valparaíso, fue su labor como buzo, especializándose en el rescate de los restos que dejaban los naufragios.

A fines de la década del 40, mientras era funcionario de Aduanas, solicitó traslado a Punta Arenas, donde formó una de las primeras empresas de trabajos submarinos, una afición que comenzó a desarrollar en su ciudad natal. Así nació Nautilus, producto de la admiración que Ayarza tenía por la obra de Julio Verne, donde durante diez años realizó trabajos de tendido de cables submarinos.

Su afición al buceo lo llevó a interesarse en la búsqueda de tesoros de los restos de naufragios, siendo uno de los primeros, la corbeta inglesa Doterel, que se hundió frente a Punta Arenas en 1881. Los restos recogidos, que fueron donados al Instituto de la Patagonia llevaron a que el historiador Mateo Martinic calificara el hecho como el primer intento de arqueología submarina en Chile. Otro notable descubrimiento fue el del buque de guerra alemán Dresden, frente a la isla Juan Fernández, que por años estuvo desaparecido. También realizó recuperación de restos de barcos en la Antártica.

Hermano de la Costa

A su labor en la empresa Nautilus, Ayarza sumó su activa participación en la Hermandad de la Costa, donde capitaneó en numerosas ocasiones la Nao Punta Arenas. Esta cofradía de hombres de mar fue donde pudo canalizar todo su amor por el mar y sus historias. Para Ayarza, la Hermandad de la Costa, le permitió “reflejar mis ideales y hacer realidad muchos de mis sueños, como rescatar el espíritu de fraternidad de los antiguos navegantes y además, conocer muchos países”, comentó en febrero de 2004 a La Prensa Austral.

El actual capitán de la Nao Punta Arenas, Javier Solís, lamentó la partida de Ayarza, a quien el 30 de octubre del año pasado nombraron como “Viejo lobo de mar”, junto a otros dos hermanos antiguos. “Fue capitán de la Nao en muchas singladuras, unas seis, siete veces. Fue conocido a nivel nacional por todos sus aportes, tanto a la difusión de la vida marina como al rescate de tesoros, la exploración y fue nombrado ‘Gentil Hombre de Mar’, la mayor distinción que otorga la Hermandad de la Costa”.

Junto a él, en 2013 la Hermandad de la Costa descubrió una placa a los pies del cerro El Morrión, donde los tripulantes de la expedición de Hernando de Magallanes subieron a la cima y descubrieron, así, la salida del Estrecho. Por eso, Javier Solís destacó esta coincidencia entre la conmemoración de los 500 años de esta expedición y la reciente muerte de Ayarza: “No pudo haber encontrado una mejor fecha para partir al mar de la eternidad. Estamos orgullosos que haya partido en una fecha tan importante para la navegación mundial”, resaltó.

Lamentablemente, las restricciones impedirán la ceremonia habitual con la que los hermanos despiden a uno de los suyos. Sin embargo, el 20 de noviembre se reunirán con las naos del país para un homenaje a través de un Zafarrancho virtual.