“Siento el llamado del servicio público para representar a los magallánicos en el Congreso”

Alejandro Perkic A.

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Jaime Mauricio Jelincic Aguilar, magallánico, 62 años, militante de toda la vida del Partido Radical, es candidato a diputado por el Distrito Electoral Nº28, que comprende las 11 comunas de la Región de Magallanes y Antártica Chilena. Su postulación a la Cámara Baja, para las elecciones del próximo 21 de noviembre, corre dentro del conglomerado “Nuevo Pacto Social”.

Cabe señalar que esta será la segunda vez que Jelincic busque alcanzar un escaño en el Parlamento, ya que su primer intento, en las elecciones de diciembre de 2009, no prosperó, resultando elegidos Carolina Goic y Miodrag Marinovic. En comicios del próximo mes, a Magallanes le corresponde elegir a tres diputados.

Durante los gobiernos de la ex Concertación, Jelincic ocupó altos cargos de gobierno en las administraciones de los Presidentes Patricio Aylwin, Eduardo Frei y Ricardo Lagos, siendo seremi de Transportes, gobernador provincial y también intendente de Magallanes. Tras su revés  electoral, orientó su actividad al ámbito privado en el rubro gastronómico, rol que en el último tiempo lo llevó a asumir el liderazgo de la Asociación de Gastronómicos de Punta Arenas, cobrando protagonismo como vocero de la entidad durante la irrupción de la pandemia.

Hoy, ya en campaña, Jelincic señala que su motivación para emprender un nuevo desafío electoral sigue siendo poner a disposición de la sociedad sus capacidades y experiencia política para contribuir a la búsqueda de grandes acuerdos que permitan dar cauce a la discusión que se viene, “porque aun cuando la Constituyente será la encargada de redactar la nueva Constitución, será el Parlamento el llamado a dar la bajada en un conjunto de normas que deberán ser modificadas o creadas como consecuencia del cambio del pacto social”.

“Durante más de 13 años mis esfuerzos han estado dedicado a mi función como empresario en el mundo privado, con altos y bajos, como a todos nos ha ocurrido en lo que emprendemos, en un rol que me acomoda porque desde ese lugar también puedo aportar al desarrollo regional y a la generación de empleo, pero siento el llamado del servicio público a través de la representación de los magallánicos en el Parlamento en un momento histórico en el cual, estimo tener las capacidades y experiencia política para ser un aporte a la resolución de problemas complejos en escenarios polarizados y de incertidumbre”.

– Desde su óptica, ¿cuáles son los temas de interés superior y para beneficio de los magallánicos, que deben ser considerados como prioritarios?

– “El primer tema que debemos debatir es el modelo de desarrollo que queremos para Magallanes en los próximos 20 años, el cual a mi juicio debe ser desarrollo sostenible desde el punto de vista del crecimiento económico, medioambiental y social -a escala humana- donde el centro del debate estén las personas y el fin sea mejorar la calidad de vida de los magallánicos. Esto es muy relevante, porque las estrategias a desplegar, las inversiones, los proyectos, deben ser coherentes con esta primera definición de la visión del Magallanes que soñamos, que surja de una construcción colectiva.

“En segundo término, debemos abordar los temas de las listas de espera No Ges y cómo resolver el déficit de vivienda que observamos en la región. Si bien ambos temas son en primera instancia de resolución del Ejecutivo y del Gore, también es posible generar condiciones para ello desde lo legislativo, en el momento que se comience a discutir la reforma tributaria.

“En tercer orden, como región debemos tener un rol más activo en materia de defensa de nuestro territorio y la soberanía. Tenemos en el horizonte de corto plazo conflictos limítrofes en la Patagonia ante los cuales debemos tomar una posición más activa como región y como autoridades. Uno de los principales desafíos será proteger la soberanía de nuestro territorio, se ha instalado con Argentina un conflicto por la Placa Continental extendida, un tema que es de Estado, por lo que los parlamentarios de Magallanes deberán estar atentos a la estrategia de nuestro país para defender nuestro territorio”.

– ¿Cómo califica el rol que ha tenido la Universidad de Magallanes en su misión de formar nuevos profesionales y en su contribución al desarrollo de la región?

– “Estimo que la Umag hoy tiene una tremenda oportunidad de tomar el protagonismo como formadora de jóvenes preparados para los nuevos desafíos que enfrentará Magallanes, tal como en el pasado formó ingenieros especializados para la entonces naciente industria del petróleo, hoy está llamada a formar el capital humano avanzado que necesitará el hidrógeno verde o los proyectos de centros de teledetección o de telecomunicaciones que serán una realidad en poco tiempo más al instalarse en Cabo Negro. También debe profundizar el rol que actualmente desarrolla en materia de ciencia antártica. Finalmente, otro desafío para la Umag es formar líderes capaces de conducir los destinos de la región desde el ámbito público y el privado.

“Las nuevas industrias que se avizoran en Magallanes; energía, telecomunicaciones y teledetección tienen en común que requieren capital humano avanzado y, entonces, deberíamos también revisar las mallas curriculares de nuestros colegios técnico-profesionales para ver si estamos formando el tipo de técnico que la industria necesita”.   

– Usted, como hombre público que desempeñó altos cargos en los gobiernos de la ex Concertación, ¿cómo evalúa la gestión de esa coalición en temas de desarrollo, inversión, progreso, fuentes de trabajo, etc.?

– “Los gobiernos regionales de la Concertación se caracterizaron por tener una estrategia de desarrollo regional que fue construida con amplia participación de la sociedad civil y los gremios, cuestión que la validó porque todos los sectores la sentían como propia, que las representaba y, obviamente, en cada periodo presidencial se actualizaba en algunos puntos, pero, en general, sirvió de hoja ruta para la toma de decisiones de inversión en el largo plazo. Por ello, en los gobiernos de la Concertación se lograron hitos muy relevantes tales como la generación de convenios de programación con ministerios que hicieron posible terminar con el déficit habitacional, el cual dicho sea de paso volvió a crecer con mucha intensidad, se pudo construir el Hospital Clínico y dotarlo de servicios de alta calidad, en infraestructura se logró generar los anillos de las Avenidas Frei y Costanera que cambiaron el rostro de Punta Arenas y se construyó el muelle Mardones (último puerto construido por el Estado).

“Así, año tras año se incrementaba el presupuesto sectorial y regional para financiar obras que no sólo generaban empleo en su etapa de construcción, sino que muchas de ellas eran habilitantes para la instalación de empresas en todo el territorio. En suma, si se revisan los datos de la época, la cuantía de los recursos públicos que se invirtieron en Magallanes crecieron año tras año, se generó condiciones para que los privados inviertan y generen no sólo riqueza sino que también empleos de calidad y bien remunerados”.