Olaf Scholz tendrá la dura tarea de reemplazar a Angela Merkel en el gobierno alemán
Vicecanciller y ministro de Finanzas del Gobierno, el muy moderado y austero socialdemócrata Olaf Scholz se dispone a tomar en Alemania el relevo de Angela Merkel, para dirigir una inédita coalición de tres partidos gracias a su experiencia de ministro y a una campaña sin pasos en falso.
A los 63 años, Scholz reveló este miércoles el acuerdo final de coalición negociado desde hace dos meses con los ecologistas y los liberales.
Se abre así la vía a su elección, en la semana del 6 de diciembre, como canciller de la primera economía europea, al cabo de una inesperada remontada de un partido SPD dado por muerto hasta hace poco, y que ganó por escaso margen las legislativas de septiembre.
Eso es lo que entendió Olaf Scholz. Hizo caso a sus asesores de campaña. Convenció a los votantes alemanes de que se parecería mucho a la figura imponente, experimentada y con estatura de estadista: Angela “el tractorcito” Merkel. Logró convertirse en el nuevo canciller de Alemania.
Ahora tendrá que demostrar que no sólo puede hacer el mismo gesto de los dedos en rombo que caracterizan a la líder, sino que puede caminar con sus zapatos.
Scholz presta juramento el 6 de diciembre ante el Bundestag e inmediatamente se enfrentará a una nueva crisis del Covid-19, que se ensaña por cuarta vez con los alemanes, el conflicto fronterizo en Bielorrusia, a un Presidente ruso que moviliza tropas en la frontera de Ucrania, a una China más conflictiva y a unos Estados Unidos menos fiables.