Bomba Croata vivió austera celebración de sus 120 años a la espera de concretar su gran cuartel en la Costanera

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ocos años le quedan a la Cuarta Compañía de Bomberos, la Bomba Croata, en su ubicación actual, de O’Higgins entre Pedro Montt y José Menéndez. Por eso, para celebrar sus 120 años, pidieron como gran deseo que pronto se concrete su nuevo cuartel, que estará emplazado en Avenida Costanera y que tendrá tres salidas, lo que permitirá que puedan dar un mejor servicio a la comunidad.

Un servicio que partió oficialmente el 1 de enero de 1902, cuando Punta Arenas apenas contaba con 53 años de existencia. Por iniciativa de los eslavos recién avecindados nació esta compañía de bomberos. Miguel Kacic, Andrés Juricic, Lorenzo Milos, Bartolomé Poduje, Pascual Simatovic, Pedro Marinovic, Lorenzo Ljubetic, Fortunato Kordic, Mateo Trebotic, Juan Gligo, Marcos Pivcevic, José Kovacevic, Lukas Buskovic, Tadeo Bonacic, Simón Cvitanic y Nicolás Rendic fueron los fundadores de la compañía, la que se concretó el día 6 de enero de ese año. Su primer nombre fue Compañía Austríaca de Bomberos, por ser los inmigrantes súbditos del Imperio Austro-Húngaro, según reza la revista conmemorativa de su centenario.

Esa denominación inicial causó discrepancias, lo que llevó a que a los pocos meses, pasara a llamarse Compañía Eslava de Bomberos Voluntarios y posteriormente, Cuarta Compañía de Bomberos Croata-Eslava, que se mantuvo hasta 1920, cambiándose por Bomba Dalmacia, hasta que en 1945 pasó a ser Bomba Yugoeslava. Tras la guerra de los Balcanes de principios de los ’90, el 6 de enero de 1994 recibió su nombre actual de Bomba Croata.

El actual director, Patricio Cárdenas Agoni, en la sala de reuniones, en la que se aprecian históricas fotografías junto a ropa y materiales de sus distintas épocas, expresa que tras cumplir 120 años, tienen sus objetivos puestos en el nuevo cuartel, para el cual “estamos en etapa de diseño para de ahí pasar a RS para la construcción en Croacia con Costanera, donde habrá un cuartel moderno, con salidas de máquina más accesibles, ya que serán tres, en cambio acá tenemos solamente una. Y esperamos que el próximo año se pueda iniciar la construcción. Tenemos en reparación la Unidad QR4 en Santiago y debería llegar la primera semana de marzo y la escala mecánica, un proyecto de renovación que estamos realizando porque es una máquina con 22 años de servicio y que cumplió su vida útil”, resumió Cárdenas sobre el momento actual de la compañía, que cuenta con 57 voluntarios.

La construcción del cuartel debiese tomar dos años, aunque está sujeto a los recursos del Consejo Regional, por lo que “en tres o cuatro años más esperamos contar con él, igual que más personal e ingresos para mantenerlo”, proyecta el director de la compañía.

Lamentablemente, el cambio de fase y el aumento de contagios hicieron que la bomba no pudiera estar tan abierta a la comunidad para este especial aniversario, impidiendo que los magallánicos pudieran apreciar esta historia de servicio, que en los dos últimos años ha tenido que lamentar que “bomberos se alleguen a los cuarteles, y también cuesta aceptarlos, porque ya la instrucción es online, y en el último tiempo ha bajado la cantidad de gente que quiere ingresar a los bomberos. Además, el bombero terminó cuarto medio y se va a estudiar, y cuesta mucho que después que vaya a la universidad, retome. Cuesta encontrar, antes uno iba a los colegios y cuesta más renovar a los voluntarios, es un déficit que se ha presentado, sobre todo en los dos últimos años”, reflexiona el director de la compañía.

Donde las relaciones se mantienen firmes es con el Club Croata y el Club Deportivo Sokol, aunque los bingos ya no se viven como antes de la pandemia, que perjudicaron sobre todo, la recaudación económica. “Los recursos de ingreso se han visto amilanados. Esta compañía no tiene antena, sitio para arrendar, entonces si no tiene eventos como rifas o bingos, le cuesta mucho subsistir. Así que estamos con la campaña con Aguas Magallanes que esperamos retomarla en marzo, que es un buen aporte para recaudar fondos, porque como vamos bajando de fase no se podrán realizar eventos”. Entre estos eventos que valora especialmente, fue la rifa que se hizo junto al Club de Leones para las Jornadas, donde la familia de Jaime Gutiérrez Varillas donó dos parcelas, cuya recaudación fue para las compañías de Bomberos.