Necrológicas

– Jorge Luis Veas González

“¡Este se cree Varoli…!”

Por Marino Muñoz Aguero Domingo 6 de Marzo del 2022

Compartir esta noticia
375
Visitas

Entre tantos dichos populares, todavía escuchamos o pronunciamos por ahí: “este se cree Varoli”, “te crees Varoli” o, en una versión netamente magallánica, “bueeena esteee……Varoli”. Ello aplicado, en general, a aquellos conductores (as) que exceden los límites de velocidad razonables. La expresión deriva de Lorenzo Santiago Varoli Gherardi, quien pasó a la posteridad como uno de los más grandes referentes del automovilismo chileno; fue contemporáneo del gran Bartolo Ortiz y seguirían su huella, entre otros: Raúl “Papín” Jaras, Eduardo Kovacs, Luis Hernán Videla y Eugenio Velasco.

Nació en Talca en 1901 y murió en Constitución en 1960. Estudió en el Instituto Comercial de Talca y abrazó el oficio de Mecánico, disciplina en la cual tuvo formación autodidacta. Con su metro noventa de estatura, practicó ciclismo, automovilismo y en 1925 debutó en el automovilismo en el circuito Talca- Panimávida, abandonando por fallas en su vehículo. En 1929 compite en Santiago, luego de lo cual es suspendido por tres años, a raíz de un accidente del cual se lo responsabilizó. Regresó a las pistas en 1936 cuando las velocidades promedio de los coches ya superaban los 80 kms./hr. Varoli

La década de 1940 marcaría la consagración de Varoli a nivel nacional, como también su presencia internacional (en Argentina se lo recuerda como “El Piloto Suicida”, pues en una prueba bajó en línea recta al atravesar la cordillera). De esa década se puede mencionar, por ejemplo, su primer lugar en el Gran Premio General INSA Arica – Santiago en 1948, cuando las velocidades promedio de los autos se acercaban a los 120 kms./hr. En 1949 y en su condición de Campeón Nacional, representó a Chile en el Gran Premio de la República Argentina que se corrió del 4 al 27 de noviembre, con un trazado de 11.035 kms. Esta versión es, hasta la fecha, la más larga de la categoría Turismo Carretera en Argentina e incluyó 18 provincias, llegando incluso hasta Río Gallegos a 250 kms. de Punta Arenas (8 de noviembre de 1948). La carrera fue ganada por Juan Gálvez, seguido del posteriormente quíntuple campeón mundial de fórmula 1 Juan Manuel Fangio (que había participado en la versión de 1942, que incluyó Punta Arenas). En la clasificación general Varoli ocupó el sexto lugar, entre los 21 participantes que completaron la prueba, siendo recibido como un héroe en Talca. Su última carrera fue el Gran Premio Copec 1953 Arica-Santiago, el mismo recorrido del Premio General INSA de 1948. En esta oportunidad, el talquino llegó en tercer lugar.

El deportista vivió sus últimos años en la ciudad de Constitución, donde falleció en 1960, sus restos descansan en Talca. Ese mismo año se corrió por única vez el Gran Premio Lorenzo Varoli desde Santiago a Los Ángeles; al pasar por Talca los corredores visitaron la tumba de Varoli para rendirle un homenaje.

Sus méritos deportivos lo hicieron acreedor a numerosos reconocimientos (en vida y póstumos). En 1948, la Municipalidad de Talca le otorga la calidad de “Ciudadano Distinguido y Deportista Predilecto”; en la ocasión se estrenó la “Marcha a Varoli”, obra del compositor Pedro Ariel Olea. Desde 1984 el Terminal de Buses lleva su nombre, al igual que la Escuela Municipal E- 168 (desde 1990). En 1994 al cruce de la entrada y acceso sur a Talca, se le denomina oficialmente “Cruce Varoli” levantándose además un monolito en su honor. Se institucionalizó de esta manera la denominación popular arraigada desde hacía años, derivada -según la información oral que hemos recabado- que en ese sector estaba el Servicentro propiedad del corredor y una hostería que también le habría pertenecido.

Su espíritu solidario en el deporte (paraba en las carreras para ayudar a los accidentados) lo proyectó a su vida personal y comunitaria. Fue miembro del Rotary Club y de la Masonería. En plano familiar, contrajo matrimonio con Laura Chartier, con quien tuvo 4 hijos: Amalia, Jorge, Lorenzo y Marta.

Pero, más allá de las denominaciones y los homenajes oficiales, pensamos que lo más significativo ha sido el reconocimiento popular para este gran deportista, al punto que su apellido forma parte del hablar cotidiano; justo premio para “El Piloto Suicida”, as de las pistas que sacó la cara (y la muñeca) por nuestro país: “bueeena esteee……Varoli”.

FUENTES:

http://campeonatohistoricodevelocidad.cl/grandes-pilotos-chilenos/lorenzo-varoli/

http://www.portaldelpatrimonio.cl/lorenzo-varoli-gherardi-1901-1960/

https://web.archive.org/web/20141103184809/http://www.diariolaprensa.cl/deportes/el-legado-de-lorenzo-varoli/

http://fcaglp.fcaglp.unlp.edu.ar/~rodolfo/fangio/cartc/cartc-16.html

  • El autor agradece la valiosa información aportada por las siguientes personas: Fernando Calcutta, Mateo Martinić, Vladimiro Martinić, Juan Edmundo Perich, Arturo (“Tuly”) Solo de Zaldívar, Manuel Valdés y Víctor Stenger.