A los 119 años murió la mujer más longeva del mundo
La japonesa Kane Tanaka, que con 119 años estaba reconocida como la persona viva más longeva del mundo, ha fallecido, según confirmaron las autoridades locales de la prefectura de Fukuoka, donde residía.
Nacida el 2 de enero de 1903 en la antigua aldea de Wajiro, que actualmente forma parte de la ciudad de Fukuoka, Tanaka murió en un hospital de dicha ciudad el pasado día 19 a los 119 años y 108 días.
Tanaka vivió en cinco eras distintas de Japón (Meiji, Taisho, Showa, Heisei y la actual Reiwa) y se había marcado como objetivo llegar a cumplir 120 años el próximo año, según su familia. La japonesa contrajo matrimonio a los 19 años y la familia salió adelante administrando restaurantes de fideos udon.
Tanaka estaba reconocida desde 2019 por el Grupo de Investigación en Gerontología (GRG, en sus siglas en inglés) y el récord Guinness como la mujer y persona de más edad del mundo.
Tras su muerte, la persona viva más mayor pasa a ser la monja francesa Lucile Randon, que cuenta con 118 años y 74 días.