Base antártica “Bernardo O´Higgins”: La experiencia y la visión de un año en el territorio chileno antártico
El 18 de febrero de 1948 se fundó formalmente la base antártica “Bernardo O´Higgins”, repartición del Ejército de Chile en el continente blanco. Las tareas que desarrollan los militares en uno de los lugares más apartados del país, contribuyen directamente a la comprensión del mundo, realizando registros para estudios científicos, así como tareas de exploración y soberanía efectiva.
En el marco de esta conmemoración fueron recordados aquellos que formaron parte de esta historia, como es el caso de las dotaciones y sus comandantes, quienes quedaron marcados con esta experiencia. Es así como, el teniente coronel Eugenio Moya, recordó su paso por la Antártica como comandante de la base en el periodo 2020-2021, enfrentando diferentes desafíos junto a su equipo.
“La preparación es integral, desde conocimientos técnicos comunes en terrenos nevados y glaciares, a distintos oficios necesarios para el funcionamiento de la base, en lo particular, hubo una preparación en aspectos comunicacionales, de inspecciones antárticas y manejo en muelles”, señaló.
El desafío implica entrenamiento, refuerzo de conocimiento, aprendizaje y también enfrentar las expectativas, afirmando que “el desafío, lo asocio a una ‘cita a ciegas’ donde uno puede saber mucho de la Antártica, teóricamente pero está el entusiasmo de estar físicamente lo más pronto posible, donde sin duda supera las expectativas”, comentando que “el principal desafío es que la familia esté tranquila y con una adecuada red de apoyo, para que la dotación pueda cumplir su tarea”.
Dijo que “la huella antártica, queda de por vida, es algo indeleble que le ha pasado a los grandes exploradores (…). Ha marcado mi vida profesional y personal, ser parte de una dotación en los tiempos actuales, conlleva desafíos que impactan y trascienden”.
El despliegue y sostenimiento logístico en la base antártica “Bernardo O’Higgins”, se realiza por medio de unidades navales y aéreas, en donde se realizan diferentes tareas desde el punto de vista conjunto de las Fuerzas Armadas. Es en este sentido que afirma el experimentado oficial que “lo conjunto es fundamental para el éxito de la misión antártica nacional, cada uno de los operadores antárticos juegan un rol clave y exclusivo, pero dependiente uno del otro, por una parte la Armada y la Fach, con la responsabilidad del transporte y desarrollo de campañas antárticas y por el otro el Ejército, que es el que está en forma permanente e ininterrumpida en Territorio Antártico, específicamente en la Península”.
Es de esta manera que es importante comprender “la capacidad de proyección de Chile como “país puente”, afirma el teniente coronel Moya que “el hecho de ser parte del Sistema del Tratado Antártico, y especialmente como país consultivo, obliga a la base a estar permanentemente preparado para aportar a la paz y la ciencia antártica, con sus capacidades de infraestructura y la excelencia profesional de su personal”.
Desde el punto de vista personal las vivencias son varias, al igual que las exigencias de liderar un equipo en una de las zonas más extremas del mundo, rodeados por hielos y con temperaturas que pueden alcanzar los -25 grados Celsius, así como rachas de viento de hasta 200 kilómetros por hora.