Revelaciones de un intenso mundo interior exhibe por primera vez artista magallánica Pamela Seoane

Su primera exposición presenta la joven artista magallánica Pamela Seoane, que reunió una veintena de obras que conforman “Volátil”, que podrá visitarse hasta el 20 de abril en la Sala Tierra del Fuego del Hotel Casino Dreams. Si bien ya había exhibido algunas obras en una muestra colectiva, realizada en Buenos Aires, donde estudió, esta selección de ilustraciones pintadas con acuarela podrán ser vistas en forma exclusiva por los magallánicos y visitantes de la sala. 

“Feliz por esta primera exposición individual, que es súper importante para cualquier artista y encima, en mi región, donde podrán verla mis papás, mi familia. Son seis años de trabajo entre que estudié en la universidad y diversificando la pega, porque es muy difícil vivir del arte, así que ha sido un ida y vuelta. Estudié en Buenos Aires y volví hace cuatro años” resumió la artista, ex alumna del Liceo Experimental Umag y la Escuela Patagonia.

En cuanto a su desarrollo de estilos, también trabaja en óleo y cuadros decorativos en papel calado, que le permiten llegar a un público mayor al de sus obras más intimistas como las que forman parte de “Volátil” y en la que se reflejan pensamientos y sueños. “Hay muchas lecturas de temas súper personales, creo que busco proyectar mi mundo interior y lo he utilizado como una herramienta para superar muchos temas personales complejos. Mi obra tiene temas muy tristes, pero que no están exentos de belleza”, explicó. Y claramente, a pesar de que los dibujos denotan cierta tristeza, angustia o miedos, la utilización del color les da otra dimensión. “En lo cotidiano hay colores e imágenes bellas hasta en situaciones que no lo son tantos, entonces aquí es más fácil sacar lo bello de lo horrible”.

Acuarela y tinta china son la base de estas producciones, que fueron creadas desde hace unos cinco años, junto con bocetos que tenía guardados de hace más tiempo, donde la pandemia también jugó un rol importante para concluir algunas de ellas. “El buscar una pausa a todo lo caótico que fue esa etapa, de bombardeo de información, estar encerrados y no saber qué pensar o dónde ir; en realidad, ni siquiera podíamos salir. Igual fue de una gran ayuda para poder estar en paz un rato, había una necesidad de decir cosas”, reflexionó.

Al recorrer la exposición y observar con detalle cada obra, es posible notar las distintas etapas por la que ha pasado Pamela Seoane, como su reciente maternidad, que contrasta con otras etapas más oscuras que le ha tocado vivir. Sus estudios de Filosofía han contribuido, igualmente, a desarrollar estas visiones, pese a que el arte ha estado presente en su vida desde pequeña, por influencia de su hermano, “que dibujaba mucho y le gustaba el arte”.