Erradicación del trabajo infantil

El lunes 12 de junio se conmemoró el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, con el objetivo de denunciar la explotación infantil que se lleva a cabo en muchos países del mundo, donde se obliga a los niños a trabajar, negándoles todo derecho a la educación, la salud y una vida plena que le permita su desarrollo y bienestar integral.

El lema de este 2023 fue: Justicia social para todos. ¡Acabemos con el trabajo infantil!

Según datos de la Organización de Naciones Unidas (Onu), en esta condición hay actualmente 152 millones de niños en el mundo. En Chile, de acuerdo a la Defensoría de la Niñez, más de 229 mil niños y niñas desarrollan algún tipo de labor lucrativa y nueve de cada 10 efectúan trabajos peligrosos.

Sinónimos de infancia son estudio y juegos. Sin embargo, por distintas circunstancias, muchos niños se ven enfrentados desde muy temprano al mundo del trabajo.

Aunque no cuantificado estadísticamente, nuestra ciudad no escapa a este fenómeno. Uno ve a niños vendiendo frutas y otros productos en ferias. También hay otros que piden monedas a los automovilistas tras realizar malabarismos mientras dura la luz roja del semáforo.

En ciertos casos estas prácticas revelan un espíritu de superación de los menores. Pero, la mayoría de las veces responde a una carencia económica familiar.

No obstante, al ocupar su tiempo en estos menesteres, muchos de ellos arriesgan principalmente, su continuidad en el sistema escolar. Velar porque todos los niños vayan a la escuela y reciban una educación de calidad son las claves para prevenir el trabajo infantil.

El trabajo infantil debe ser un tema de permanente preocupación. Por lo mismo, que tradicionalmente durante esta conmemoración diversas autoridades involucradas manifiestan pública inquietud al respecto, siendo un importante paso en orden a no perderlo de vista y, más aún, a dimensionarlo, recabando información que permita analizar en profundidad el escenario local en un futuro mediato.